viernes, 28 de octubre de 2005

Digital, ¡agh!

Ayer, por fin, entregué el libro que me había estado ocupando y preocupando últimamente. En los últimos días he dormido poco y he trabajado mucho, no he ido a la piscina y tampoco me he puesto a escribir por aquí: había otras prioridades.
Hoy me he levantado tarde, para ver si recuperaba algo de mi salud perdida durante los últimos días, y dispuesta a acudir a la imprenta unas horitas (¡que me he levantado a las nueve y media, todavía tenía mañana por delante!). Pero he llamado a A. y... mecachis, no iba a estar: ¡hoy se va a recoger una imprenta digital nueva que se ha comprado!
El negocio es el negocio, hay que ser realistas, no como otra que yo conozco. Pese a todo, la tipografía prevalece.

Lista de máquinas
A. tiene en su taller seis chibaletes con tipos (a veinticinco cajas por chibalete... ¡no está mal!), cuatro máquinas de tipografía, dos máquinas de offset y hoy llegará la nueva máquina digital.

Las cuatro máquinas de tipografía son: una Heidelberg automática de aspas, según A. es la máquina que más dinero dio a ganar en los años sesenta. Tiene un sistema de aspas con unos embolitos que aspiran el papel, cuando el papel hace contacto con el aspa, unas pinzas lo agarran y lo colocan en los registros, la máquina imprime y el aspa gira de nuevo, ordenando el papel impreso en un nuevo montón al tiempo que otra aspa aspira y agarra un nuevo papel blanco. El caso es que la máquina trabaja sola y eso, qué duda cabe, parece de lo más rentable.

Además A. tiene una Hispania de tamaño folio prolongado. A esa máquina aspiramos R. y yo, y como sabéis la cosa ya está pactada. Dice A. que con esta máquina se pueden hacer muchos trabajos que el resto de máquinas no admiten, tendremos que rebautizarla: ¿la Polivalente? ¿la Todoterreno? En fin...

Luego está la Superrápida. Y en el nombre va lo bueno y lo malo de la maquinita. Es de alimentación manual y por mucho que ralentices la velocidad, esa máquina corre que se las pela. O sea, que hay que ser un maquinista muy experimentado para no pillarse las manos.
No es mi caso, de momento. La Superrápida tiene una platina de cuartilla prolongada, es una máquina pequeñita. Ah, olvidaba decir que la Superrápida puede funcionar a pedal. Ahí la velocidad de impresión dependerá de la pierna del maquinista. Opción no recomendable.

Por último, A. tiene su querida Boston. No sé exactamente el tamaño de la platina, pero me parece que no imprimirá más allá de 10x15. Ésta es una máquina de sobremesa, manual y ligera y fácil de utilizar. Es perfecta para hacer tarjetas de visita.

Como el offset y la impresión digital aquí no nos interesan, finalizaré ahora mi "rollo maquinero".

domingo, 23 de octubre de 2005

Correo indiscriminado o spam

En mi última anotación hablé un poquito de música y parece que ha sido como la miel, que ha atraído a las moscas: entre los comentarios se nos coló un mensaje de correo indiscriminado (o spam) por lo que he hecho uso de las facilidades que otorga blogger y he activado un filtro para los comentarios. Espero que sigáis escribiendo, los que habitualmente lo hacéis y aquellos que sé que leen pero no se dejan leer. Ahora, antes de poder enviar un mensaje, os saldrá una pantallita con letras y números que deberéis reconocer y teclear. Nada del otro jueves, el sistema habitual de la red.

P.D.: Eso me pasa por no centrarme en lo que toca, la imprenta.

domingo, 16 de octubre de 2005

Avec Moët-Chandon

El viernes R. y yo comimos con auténtico champagne Moët-Chandon. La botella nos fue regalada hace quince días (M. y E., que fueron de lo más generosos) y el viernes la ocasión lo merecía. Ya somos propietarios de los locales que en unos meses acogeran el taller tipográfico, entre otras cosas. Así que esta semana hemos estado de lo más ocupado entre banqueros y notarios.
Aún así, la semana nos cundió tanto como para ir el jueves, así, en un abrir y cerrar de ojos, a Barcelona. La investigación (para aquellos que no estén enterados debemos entregar el trabajo a finales de noviembre, este noviembre) para la BV ocupa ahora casi todo nuestro tiempo; y entre otros menesteres el jueves habíamos programado entrevistar a J.M.ª C., uno de los editores más longevos de España (Cataluña todavía es España ¿verdad?, a ver si me voy a equivocar). La cosa fue ir, entrevistar y regresar; y el día no acompañó nada. A la altura de Ulldecona R. y yo temimos por nuestra integridad física, el chaparrón se tornó en tormenta con una cortina de agua densa, tupida. Un poco de miedo pasamos, pero llegamos a casa sanos y salvos. El coche, también.
La entrevista fue tal y como esperábamos y resultó interesante conocer al señor C.


Mañana salimos de viaje hacia Galicia; nos espera una entrevista en Santiago de Compostela (también forma parte de la investigación), luego R. debe entrevistar a José Jiménez Lozano en Valladolid, esta vez para la revista Turia. Los dos esperamos ese momento con ilusión pues admiramos al caballero.
Tras la parada en Valladolid, continuaremos viaje hacia Madrid, donde retomaremos nuestras entrevistas para la BV: dos. Y de vuelta a casa.


Nuestro viaje a París, hace un par de semanas, fue bien. Andamos lo que no está escrito, visitamos librerías y, ¡claro!, compramos libros. Yo me hice con el Lexique des règles typographiques en usage à l'Imprimerie Nationale. Son 196 páginas con las reglas tipográficas y de estilo que rigen en aquel organismo. R. y yo pensamos que sería de utilidad para la edición de obras bilingües en francés. Sin embargo, ignoraremos sus reglas para el español, que las tienen. En la página 78, en la entrada "Espagnol (composition de l')" se dice que los signos de interrogación y exclamación "sont séparés des mots concernés par un espace fine insécable" (sic).
Por cierto, los amantes del plomo franceses andan revolucionados para salvar el patrimonio tipográfico de su imprenta nacional. El Estado francés ha vendido algunos de los edificios en los que reposaban los tipos de la imprenta y piensa deshacerse de todo lo que hay dentro. Podéis echar un vistazo aquí: www.garamonpatrimoine.org

P.D.: Intimida saber que a una la lee alguien que ni es de la familia ni es amigo. ¡Qué responsabilidad! Gracias por leer.
Escucho a Antony & the Johnsons, me gusta mucho "For today I am a boy". En días atrás he estado escuchando lo último de CocoRosie, en este nuevo disco -que me ha gustado mucho- colabora Antony: la canción se perfila como mi favorita del disco.